Hoy es martes y toca parlotear sobre la foto del miércoles mudo de la semana pasada.
Muchos de vosotros estáis deseosos de saber la historia que guarda esta foto, espero no defraudar. ¡Qué tensión! Jeje.
Esta foto fue hecha hace un chaparrón de años en la feria de mi pueblo. Bueno en la feria del Corpus Christi que celebrábamos antes, ahora solo tenemos la de la Virgen del Rosario en Octubre. El señor que lleva de la mano a las dos niñas, es mi abuelo materno, Juan José. La niña mayor soy yo y la más pequeña es mi prima hermana María José, mi querida prima Mari. La que quiero como una hermana. La señora que se ve de fondo, es mi abuela materna, Antoñita. Así que ya habéis conocido a mis cuatro abuelos ;)
18 de Junio de 1930 |
Mi abuela pudo disfrutar de mi boda, del nacimiento de mis hijos y de sus comuniones. Era una mujer muy dulce, muy serena, muy educada. Toda una gran señora que, la gente que la conoció, siempre tiene buenas palabras para ella. Era muy guapa, tenía unas piernas y unas manos preciosas. Para mi desgracia y las de mis primas, ninguna las hemos heredado, qué le vamos hacer.
Las 4 generaciones |
Mi abuelo era el típico hombre de aquella época. Sombrero, puro, era agricultor y le encantaban los caballos e ir al futbol. Tenía su carnet de sevillista, era gran amante de los toros y, cómo no, amigos tenía en todos lados.
Aquí estoy yo, el punky de la derecha, con mis abuelos y mi primo Juan José. |
Y que contaros de mi prima María José, Josefa, como yo la llamo para hacerla rabiar. Pues, como he dicho más arriba, que somos como hermanas. Desde pequeñas éramos inseparables. No podíamos estar la una sin la otra. Nos pegábamos como locas, pero no podíamos estar separadas. Cuando mi abuela se enfadaba, cosa rarísima porque era muy paciente, decía “Se terminó, ya cada una a su casa.” llorábamos como descosidas porque nos separaban. Fijaos que como se ve en la foto de arriba, hasta vestíamos hasta iguales.
Aquí ya estamos más creciditas con nuestras pintas noventeras |
A parte de mi prima Mari, tengo otros primos estupendos, pero claro, como ella era la mayor de entre sus hermanas, siempre acabábamos juntas.
Y hasta aquí llegó el Martes Parlanchín.
Besos que disfrutéis de las vacaciones y hasta el próximo día
Me encantó ver tus fotos, por lo visto transitamos épocas similares.
ResponderEliminarBesos María
hoy desde
http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2014/07/por-que-las-manzanas-se-vuelven-paposas.html
Buena quinta la de los 60 ;)
EliminarUn beso y gracias por visitarme
Me encantan tus marte parlanchines y escuhar tus historias, un recorrido muy bonito.
ResponderEliminarSaludos¡¡¡
Me alegro de que te gusten. Como esto de los martes me lo saqué de la manga nunca sé si os gusta o no. Gracias por comentar.
EliminarUn beso